En la actualidad, la enseñanza que se inculca en las familias, especialmente en las regiones que se encuentran en un “subdesarrollo” económico y en donde existe grandes obstáculos para lograr escapar de la pobreza, esta basada en la idea la de brindarles una educación enfatizada en la adquisición de conocimientos que puedan formar intelectualmente a los hijos para que así logren conseguir un buen trabajo que los lleve a salir de sus aflicciones monetarias y tener un mejor nivel de vida. Pero no siempre un buen puesto trabajo puede traer beneficios, por lo contrario, si no tiene un buen conocimiento financiero se puede contraer un gran numero de deudas a causa de prestamos, impuestos o tarjetas de crédito, que lo van a terminar por hundir. Entonces si una educación integral y la idea de trabajo duro, no nos puede garantizar el poseer mucho dinero, ¿que lo hará?
Existen muchas posibles soluciones a esta incógnita, pero principalmente se tiene que cambiar la mentalidad que nos ha acompañado por varias generaciones, y que pretende seguir implantando; por que el mundo todos los días va cambiando por ende nuestra mente también. Es en este momento que se puede mencionar a Robert Kiyosaki y a su libro “Padre rico padre pobre”, en cual se empieza a formar nuevos paradigmas entorno al trabajo y en especial a la riqueza, que pueden ser de gran ayuda para cambiar la manera en que pensamos.
Un gran obstáculo en el propósito de conseguir dinero de una forma más rápida es el miedo, el miedo hace que la mayoría de la gente trabaje en un empleo, el miedo a no poder pagar sus cuotas, el miedo a ser despedidos, el miedo a no tener suficiente dinero, miedo a comenzar de nuevo. Y es que las personas se amedrentan ante los cambios y no son capaces de tomar riesgos que los podrían llevar a tener muchas ganancias por la idea de “jugar sobre seguro”, y esto se debe principalmente a que durante su formación no se les enseña a afrontar el mundo económico, el mundo